martes, 26 de junio de 2012

Ensayo de Laura Martell.



La educación es un problema actual que yace en México, la cuestión es ¿Cómo se solucionará?, el problema radica desde malos programas educativos, empleo inadecuado de técnicas y modelos educativos, maestros que solo tienen el “título”, maestros que no están capacitados y que no están comprometidos con su profesión.
La sociedad espera que el gobierno solucione los problemas y que otras personas hablen por nosotros, ¿Por qué no tomar la iniciativa de nuestras inconformidades?, siempre se espera a que alguien más lo haga y nadie alza la voz, nos convertimos en espectadores inconformes de la toma de decisiones de otras personas y dejamos que los problemas actuales perduren sin tener solución pasando por generaciones sin lograr ningún cambio.
El licenciado en pedagogía puede ser capaz de cambiar la educación, utilizando sus propias perspectivas, pero no solo se necesita de uno si no de muchos pedagogos que estén dispuestos a lograr dichos cambios.
Desde tiempos remotos se ha visto la necesidad de “educar”, de transmitir conocimientos, valores, costumbre, etc., con el objetivo de lograr avances educativos en la sociedad y para esta finalidad se han empleado técnicas y teorías de enseñanza-aprendizaje, se podría decir que se tienen los recursos necesarios para una educación efectiva, sin embargo muchas de estas herramientas se desconocen por lo que es imposible aplicarlas.
La problemática más grande la presenta la sociedad, que pide progresos y a la vez está sujeta a cambios (modifica costumbres, patrones de conducta, etc.) obligando al profesor estar a la vanguardia, aunque muchas veces no se aplica y el profesor pierde el control de lo que pasa en la actualidad y eso repercute en el aula de clases, muchos de estos profesores se dejan llevar por el beneficio económico y deciden dedicarse a la profesión sin tener el conocimiento que debe tener, este es una problemática actual global al existir no solo en México si no en otras partes del mundo. ¿Qué se necesita para cambiar esta situación? La pregunta se plantea fácilmente, responderla cuesta un poco de trabajo pero resolverlo con hechos es otro problema.



La pedagogía siendo una profesión que va más allá de ser un profesor normalista debería abrir campos de trabajo más extensos, sin embargo esta carrera aún no es muy conocida en México y al igual que otros profesionistas egresados se presenta la problemática del campo laboral, ya que al graduarse las posibilidades de encontrar trabajo son pocas, muchos de ellos terminan en empleos inapropiados así como perspectivas de mejorar el nivel socioeconómico, lo cierto es que con mayor número de personas escolarizadas las posibilidades de trabajo aumentan, ya que tanto en la actualidad como en el futuro en la actividad económica, las formas de organización del trabajo y en las bases técnicas de la producción, surgen nuevas necesidades y exigencias relativas a las competencias y conocimientos de hombres y mujeres para insertarse en el mundo laboral (Población Económicamente Activa, P.E.A.).
Otra problemática a tomar en cuenta es que la educación se centraliza sólo en zonas urbanizadas y las rurales quedan literalmente aisladas del derecho a esta, como estipula el artículo 3º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos: “Todo individuo tiene derecho a recibir educación”, entonces ¿Por qué se les priva este derecho?. Los nuevos profesionistas egresados buscan encontrar trabajo en lugares con amplia comodidad en todos sus aspectos y volvemos a la misma cuestión, ¿vocación o interés personal?, si existiera la verdadera vocación por parte del profesor, el lugar no importaría y mucho menos carecer de cosas materiales ya que el objetivo primordial del profesor es llevar la educación al individuo y no el individuo a la educación, tenemos que concientizarnos en que muchos de esos niños y adolescentes de zonas rurales quieren aprender, salir de la pobreza, buscar un futuro mejor y que muchas de las ocasiones por falta de dinero, falta de escuelas o falta de profesores que quieran dar clases en este tipos de lugares, no logran cumplir sus sueños.
Otro tema a tomar en cuenta son los recursos que se tienen y de los que se pueden disponer para fines educativos, uno de ellos es la tecnología, requiriendo gente preparada en conocimientos básicos de informática y capacidades en las nuevas tecnologías de información y comunicación planteando nuevas exigencias de formación en los sistemas educativos ampliando el ámbito laboral a los profesores, pero actualmente existe una inequidad social en la que se vuelve a tomar de ejemplo las zonas rurales y urbanizadas; la tecnología es mal empleada y aunque el objetivo es lograr una igualdad tanto en hombres y mujeres como en la educación, no es tan fácil llevarla a cabo ya que logramos observar que la vanguardia ha logrado clases de computación, equipamiento de aulas de clase con computadoras, pizarrones electrónicos y libros que complementan las clases con investigaciones que se realizan en paginas de internet que vienen recomendadas en dichos libros, etc., el problema está en que, en la ciudad no todas las escuelas cuentan con estos beneficios y en las zonas rurales aunque poseen esta tecnología, no todos tienen una computadora y mucho menos llevar a cabo las investigaciones en paginas de internet; en otros lugares, las aulas no pueden utilizar sus pizarrones electrónicos puesto que equipan las aulas sin revisar si se tiene acceso a la electricidad, entonces vemos que al lograr una igualdad seguimos en una inequidad.
El licenciado en pedagogía a la vanguardia de las problemáticas sociales y lo que acontece en la misma, no sólo hace el papel de profesor si no también de planeador, al preocuparse en los sistemas educativos, haciendo mejoras o cambiándolas por unas más efectivas; como conocedor de técnicas y modelos que domina puede lograr cambios formidables en las aulas de clases, ya que actualmente la educación se rige de un modelo tradicionalista incompleta, porque no es bien aplicada por los profesores, aún así el pedagogo buscará la forma de terminar con este tipo de enseñanza o llevarlo a cabo como es, valiéndose de su amplio conocimiento y de sus propios currículos educativos, así como la empleación de otros modelos educativos de gran efectividad.



Lo que la educación necesita son cambios en la forma de enseñar y maestros que realmente tengan los conocimientos necesarios para ejercer clases dentro de las aulas, por lo que el pedagogo es una persona realmente capaz; pero no sólo se preocupa por la buena impartición de sus clases si no también en el desempeño del alumno y lo que origina deficiencias en la misma, mediante observaciones grupales e individuales por lo que el pedagogo también esta capacitado para dar orientación escolar y vocacional.
Otra de las preocupaciones mas trascendentes son los programas educativos que no pueden ser aplicados a todos de la misma forma aunque eso es lo que se pretende, por lo que se pueden plantear programas acordes a las necesidades de las zonas rurales y urbanizadas para lograr una mejora en la educación en México.
El pedagogo siendo consciente de la realidad en la que vivimos, hará de sus alumnos, individuos críticos y autopensantes, alejándolos de la enajenación mental en la cual nos encontramos sumergidos, para que piensen y razonen por sí mismos.
Una de las ventajas que se observa actualmente es la reformación de la obligatoriedad de la educación media superior, que conllevará en unos años un amplio campo laboral, brindando oportunidades de trabajo a futuros profesores.
Uno de los grandes cambios que se ve hoy en día son los avances tecnológicos y es probable que en un futuro ya no se necesite de profesores en las aulas de clases por lo que este es el momento de realizar cambios, de preocuparnos por la educación que yace en México y sobre todo preocuparnos por esos niños y jóvenes que esperan que nosotros les brindemos una buena educación. No pensemos en el futuro, pensemos en el presente, si tú no comienzas a realizar cambios ¿Cómo esperas que se realicen en un futuro?, no dejemos todo a una nueva generación, mientras seamos más pedagogos comprometidos con la profesión, los cambios se harán más notorios y así será posible terminar con las problemáticas educativas y sociales en las cuales nos vemos envueltos.

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